LO QUE SIEMPRE HEMOS QUERIDO DECIR, PERO HASTA AHORA NUNCA NOS ATREVIMOS

miércoles, 25 de agosto de 2010

CARTA A LA VIDA 2008






Minutos antes de celebrarse el enlace

Clara Méndez compartió sus sentimientos con los novios…



El amor no reconoce las distancias, tampoco los hábitos de las costumbres. Cuando el insondable miedo a lo desconocido nos embarga, ni siquiera en ese instante desfallece. El amor simplemente llega, se instala y desafiante en su inocencia lo abarca todo con una intensidad proporcional a su fragilidad.

Hoy hemos sido nosotros los escogidos para ser testigos de un evento que no se volverá a repetir. Somos el testimonio vívido del vínculo matrimonial entre estas dos personas, algo que quedará grabado en las pestañas del tiempo. Desde un principio fuimos cómplices, porque desde entonces acariciamos la ilusión de verlos juntos en un día como este y soñarnos parte de una ceremonia como esta, confabulados en el deseo de verlos felices, sea el tiempo azul de cielos o del gris que acompaña las tormentas.

Para estos dos el viaje comienza hoy, habrán otros momentos de plenitud y aunque sus rostros aún no reflejen la total realidad de lo que está sucediendo, el susto es delicioso, el sobresalto es uno de amor que los transformará en compañeros; en pareja para toda la vida; en amantes; en un todo el uno para el otro.



Enhorabuena. 

2 comentarios:

  1. Es una carta preciosa! Con una definición muy bella y cierta del Amor.

    Un abrazo, querido Marco.

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  2. Se me enredó el escepticismo en las "pestañas del tiempo".
    Tantos enlaces a los que asistimos
    ¿quién no se ha puesto en la piel de Clara?

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