NO ESTÁS SOLA
Necesitas saber que no estás sola.
El secreto se guarda en esas teclas
para que el vínculo lo descifren nuestros ojos.
Compartimos el retorcido hilo de esta vida
teñida de alegría, soledad y miedo,
colgando a veces en precarias condiciones.
Mas otras, con el férreo puño encerrando
la ilusión vestida en el azul de un nuevo amor
y la fe tendida al pie de los puntales.
No estás sola y nunca lo estarás
porque juntos viajamos por este mundo
creado por nuestras convicciones,
armados de palabras, las nuestras,
esas que acarician cuando la piel reclama
un soplo ya cuajado que resucite el alma,
la mía o la tuya para continuar el rumbo,
para hacernos más fuerte, para que el verbo
siga su marcha. No estás sola.
Marco Antonio
Necesitas saber que no estás sola.
El secreto se guarda en esas teclas
para que el vínculo lo descifren nuestros ojos.
Compartimos el retorcido hilo de esta vida
teñida de alegría, soledad y miedo,
colgando a veces en precarias condiciones.
Mas otras, con el férreo puño encerrando
la ilusión vestida en el azul de un nuevo amor
y la fe tendida al pie de los puntales.
No estás sola y nunca lo estarás
porque juntos viajamos por este mundo
creado por nuestras convicciones,
armados de palabras, las nuestras,
esas que acarician cuando la piel reclama
un soplo ya cuajado que resucite el alma,
la mía o la tuya para continuar el rumbo,
para hacernos más fuerte, para que el verbo
siga su marcha. No estás sola.
Marco Antonio